Violencia de género

Ante esta tremenda lacra que azota a la sociedad, el otro día se me ponían los pelos como escarpias al escuchar en la tele que los recortes del gobierno podrían estar afectando a la lucha contra la violencia de género.

Estoy convencido de que esta lucha no se va a ganar con más dinero o medios que se pongan, pero cierto es que menos ayuda si además los recortamos. Para proteger la vida de una persona vale la pena todos los medios posibles que en manos del gobierno pueda estar.

Pero aparte de esto, quiero hacer una reflexión que, extrañamente, no he escuchado en ningún medio, y es la siguiente: ¿Es posible que cuando se da una noticia de una mujer muerta en un medio de comunicación incite a otro maltratador a matar? ¿No es un dato a tener en cuenta que cuando un maltratador mata y luego se suicida, al día siguiente otro maltratador mata y también se suicida? Estas preguntas no las puedo responder yo porque no sé la respuesta, creo que las debería responder un sociólogo o un psicólogo.

Tampoco sé si el "tapar" las noticias de violencia de género en los medios de comunicación va en contra de la libertad de informar. De todas formas no estoy diciendo que se tengan que prohibir el dar estas noticias, pero sí que los medios de comunicación se la planteen  porque de lo que sí estoy seguro es que estas noticias pueden ser un acicate para un presunto maltratador.

Esta semana hemos escuchado también la noticia de un exmarine norteamericano que ha asesinado a su exmujer y cinco miembros de su exfamilia política por un problema de la custodia de sus tres hijos. ¿También nos van a dar las noticias de la violencia de género en otros países? ¿Es eso tan necesario?

En España tenemos 50.000 casos denunciados de violencia de género (solo denunciados). ¿Cuántos de estos casos serán de extremo riesgo por una traumática separación con disputas sobre la custodia de los hijos? Unos cuantos, no sé, vamos a suponer 20, por poner una cifra. Me gustaría que un sociólogo o psicólogo me dijese qué puede pasar por la mente de un presunto maltratador o asesino cuando escucha una noticia como la del exmarine.